Bueno, vamos a ver. Este artículo, y los que le seguirán, viene desencadenado por una “pequeña” discusión que hemos tenido hoy por la mañana mi amigo Rafa y yo mientras estábamos en la biblioteca “estudiando”, o haciendo que estudiábamos mejor dicho, para nuestro examen de mañana. Ya no me acuerdo como comenzó la discusión pero el caso es que en apenas un par de minutos nos enfrascamos en una verborrea cuya consecuencia final fue quedarnos prácticamente solos en la sala, en fin, lo que vienen a ser los “daños colaterales de la ciencia”.
Para empezar con el tema que nos ocupa, hay que decir que el número de células de un tejido es controlado esencialmente por dos tipos de procesos, la multiplicación celular o “proliferación” y la muerte celular fisiológica o “apoptosis”. Ambos procesos son estimulados o inhibidos por factores que actúan solubilizados en el medio como los factores de crecimiento o las citoquininas o que se presentan unidos a la superficie de las células vecinas.
La “apoptosis” es una muerte celular programada genéticamente que produce una degradación limpia de las células y conduce a su eliminación. Ésta “apoptosis” se caracteriza por las modificaciones que sufre la membrana celular, el encogimiento del núcleo, condensación de la cromatina y la posterior fragmentación del DNA. Más tarde, después de que la célula ya haya muerto por “apoptosis”, los macrófaos ( el camión de la basura que tiene contratado nuestro cuerpo) y otras células fagocitarias reconocerán a estas células y las “engullirán” sin que se produzca una inflamación del tejido donde se encontraban.
La apoptosis es desencadenada por una serie de señales que utilizan diferentes vías de transmisión.
La discusión que tuvimos mi amigo Rafa y yo hoy por la mañana giraba en torno a esta cuestión. Exactamente, discutíamos por establecer el componente celular o la reacción desencadenante de la “apoptosis”, el hecho sin el cual no se produciría ésta.
Podemos decir que hay un grupo de “cisteinproteinasas” en el citoplasma y más conocidas como “CASPASAS” que previamente a la “apoptosis” celular se activan entre si a modo de cascada enzimática, rompiendo una vez activadas componentes celulares tales como la lámina de las envolturas nucleares o las proteínas que conforman la estructura celular. También activan DNasas especializadas en romper el ADN nuclear, probacando la muerte de la misma.
La “necrosis” se diferencia de la “apoptosis” en que la muerte de las células generalmente es causada por daños físicos o químicos. Así la necrosis produce tumefaccióm, haciendo que las células dañadas estallen de forma aparatosa desencadenando así una reacción inflamatoria.
2 comentarios:
Muy interesnate tu artículo Aaron lo voy a agregar a mis sitios de interés, si estas de acuerdo.
Saludos compañero Blogger.
Gabriela
www.genmolecular.wordpress.com
Claro, claro, me parece estupendo y te lo agradezco, yo haré lo mismo con tu blog y lo agregaré como "blog amigo". Me alegro de que te guste el artículo, la verdad es que surgió tal y como lo cuento, es curioso, la delgada línea que separa la apoptosis de la necrosis, jeje.
Un saludo y muchas gracias de verdad.
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