De todos es sabido que el agua de mar no es apta para el riego, al igual que tampoco lo es para el consumo humano por obias razones osmóticas. Con esto, investigadores de la Universidad de Córdoba han proclamado que esto no siempre es así o al menos no para todas las especies vegetales. Dicho lo cual, el grupo de científicos al cargo de la investigación han descubierto que para la variedad más extendida de uno de los cultivos, a su vez más extendidos de nuestra cuenca mediterránea, el olivo, esto no se cumple, puede tolerar concentraciones de sales de hasta 5 veces menor que la concentración encontrada en el agua del mar. La variedad de la que estamos hablando es la Picual y dichos investigadores aseguran que con éstos valores de salinidad (6,5gr/L), ni el crecimiento ni la calidad o cantidad del fruto se verá afectada en lo más mínimo.
Este grupo de Biólogos también se ha dado cuenta que el olivo es bastante tolerante al incremento de cloro mientras que no lo es tanto con el incremento de sodio en el medio para lo cual será recomendable introducir calcio en el agua, produciendo así un efecto tampón que reduzca los efectos perniciosos de dicho ión.
Ya vendrán las aplicaciones de éste estudio, mientras tanto, un saludo
2 comentarios:
Qué curioso, ¿no? A ver cuándo lo ponen en práctica...
Un saludo!
obVio, Aaronceteeee
Publicar un comentario